– Antes de salir, hazle una buena revisión a tu coche para evitar sufrir averías en el extranjero.
– Si aun así la has pasado pero la suerte no te acompaña y necesitas asistencia en carretera fuera de España, tu seguro será el encargado de dártela. La mayoría ofrece cobertura internacional, pero asegúrate de ello antes de salir y, en el caso de que este servicio no estuviese cubierto, contrata un seguro de viaje para evitar quedarte tirado y sin ayuda.
– No olvides que no estás exento de las multas de tráfico cuando viajas por Europa. Con la directiva europea 2015/413, por la que se facilita el intercambio transfronterizo de información en materia de seguridad vial, nadie quedará impune. Eso sí, esta directiva solo incluye estas infracciones: exceso de velocidad (comprueba cuáles son en cada uno de los países que visitas), no llevar puesto el cinturón de seguridad, saltarse un semáforo en rojo, conducir bajo los efectos del alcohol y/o drogas (hay países donde la tasa es 0, ¡compruébalo!), no usar el casco si se viaja en moto, circular en sentido contrario a la marcha y usar el móvil o cualquier otro dispositivo al volante.
Posibles sanciones que implicarán la inmovilización del vehículo
Ten cuidado con todas, porque hay sanciones que implicarán la inmovilización del vehículo.
– Si sufres un accidente dentro de la Unión Europea, Croacia, Islandia, Noruega, Suiza, Liechtenstein y Andorra, debes saber que todas las pólizas emitidas en estos países se acogen al Convenio Multilateral de Garantía, por el que se garantiza la cobertura mínima de seguro requerida por ley. Si el accidente ha sido causado por el vehículo extranjero, debes acudir al Consorcio de Compensación de Seguros, que es el Organismo de Información Español, donde te notificarán quién es el representante de la aseguradora del causante en España.
Por otra parte, si viajas a Albania, Bosnia y Herzegovina, Bielorrusia, Croacia, Macedonia, Montenegro, Serbia, Eslovenia, Israel, Irán, Marruecos, Moldavia, Rusia, Túnez, Turquía o Ucrania, deberás pedir a tu compañía de seguros la Carta Verde, que es el documento de certificación de que nuestro vehículo tiene seguro de Responsabilidad Civil Obligatoria.
Si tenemos la mala suerte de sufrir un accidente en estos países, hay que comunicarlo a la Oficina Española de Aseguradores de Automóviles del país en que ha ocurrido y a la aseguradora en España. Ellos se encargarán de solucionar el problema.
– Por último, y en caso de robo del vehículo, debemos asegurarnos cuál es la cobertura que nos da nuestra compañía de seguros en este caso.